Cabo Pulmo – esperanza para los arrecifes de coral

Tres peces grises nadan frente a una gran cabeza de coral.

Peces nadando en la Reserva Marina de Cabo Pulmo, en la península de Baja California.

(Usuario de Flickr Programa del Golfo de CMBC, fotografía tomada por Octavio Aburto)

En la costa este de la península de Baja California, México, se encuentra una pequeña área marina protegida que representa uno de los éxitos más admirables en la conservación de los océanos. Cabo Pulmo es un arrecife de coral muy antiguo, cercano a un pueblo muy pequeño. Los arrecifes de Cabo Pulmo, cuya edad se estima en unos 20 000 años, siempre se han considerado un tesoro de la península de Baja California. John Steinbeck escribió acerca de los arrecifes, llenos de vida y de colores eléctricos, en su libro de 1951, Por el mar de Cortés.

A inicios de los sesenta, tras décadas de pesca excesiva, los arrecifes de Cabo Pulmo ya no eran el paraíso repleto de coloridos peces de antaño y las 120 personas que allí vivían lo notaron. Particularmente, la familia Castro. Los Castro llevaban un siglo viviendo en Cabo Pulmo y le tenían lazos muy estrechos con el mar que les brindaba trabajo y alimento. Tres generaciones de Castros —Mario, Paco, Luis, David, Braian, Yair y Joshua— comprendieron que tendrían que abandonar la pesca para salvar el arrecife. Se acercaron a la comunidad con el plan y, con el apoyo de otros pescadores, presionaron al Gobierno y lograron garantizar la calificación del arrecife como área protegida. 

En 1995, el estado mexicano de Baja California Sur estableció de manera oficial el Parque Nacional de Cabo Pulmo, un área marina protegida que abarca 27,5 millas cuadradas (7 111 hectáreas) del arrecife de Cabo Pulmo. Del vasto mar, solo el 2 % está protegido y solo el 0,1 % está libre de actividades de extracción como la pesca y la minería. En el golfo de California, solo el 5 % de las áreas protegidas están definidas como zonas de prohibición de pesca. En el momento de su fundación, el Parque Nacional Cabo Pulmo reservaba un impresionante 35 % de su extensión a zonas de prohibición de pesca. Gracias a la lucha y determinación de las familias locales, se amplió la prohibición de la pesca al 100 % del parque.

No sucedió de la noche a la mañana, pero los arrecifes de Cabo Pulmo se transformaron. En 2009, después de 14 años de protección, todos los grupos de peces habían regresado a Cabo Pulmo, desde pequeños herbívoros hasta carnívoros medianos y depredadores principales. Los tiburones, las rayas gigantescas, las ballenas jorobadas, las tortugas marinas y las águilas pescadoras se encuentran entre las muchas especies que ahora acuden a Cabo Pulmo para reproducirse, alimentarse y vivir. El arrecife se ha convertido en un refugio para al menos una especie en extinción: el gran y valioso mero baya

Vista previa Tres peces grises nadan frente a una gran cabeza de coral.

Peces nadando en la Reserva Marina de Cabo Pulmo, en la península de Baja California.

(Usuario de Flickr Programa del Golfo de CMBC, fotografía tomada por Octavio Aburto)

Todos los cálculos realizados indican que la cantidad de peces ha aumentado. Pero calcular la población de peces tiene sus limitaciones: un gobio de 5 onzas (141 gramos) no tiene el mismo impacto en un ecosistema que un tiburón de 100 libras (45 kilos). Por esta razón, los científicos tienen un método para comparar la cantidad de vida en un ecosistema: suman la masa de todos los animales vivos y la denominan “biomasa”. Durante los 14 años de protección, la biomasa de Cabo Pulmo aumentó un 463% y era cinco veces mayor que la biomasa en las zonas sin prohibición de pesca cercanas. En 1995, los principales depredadores, como los tiburones y el gran mero, habían desaparecido por completo. Hacia 2009, la biomasa de los principales depredadores se había multiplicado por diez. Según todos los indicadores, el área protegida es un éxito. De hecho, Cabo Pulmo cuenta con el mayor crecimiento de la biomasa observado por los científicos en cualquier área protegida.

El parque es tan exitoso e importante para la recuperación de las poblaciones de peces autóctonos que en 2005 fue nombrado sitio del Patrimonio Mundial de la

UNESCO y, en 2008, se convirtió en un sitio de los Humedales de Importancia Internacional de Ramsar.

Si bienhay parques nacionales y áreas marinas protegidas más extensas, Cabo Pulmo ha tenido gran éxito gracias al compromiso de la comunidad para hacer cumplir la normativa y proteger la reserva. Ahora cosechan los frutos de su trabajo como recompensa. La pesca en las zonas que bordean el parque es mejor que antes, y comienza a desarrollarse la industria turística. En 2006, el turismo aportó $538.000 al pequeño pueblo, generando empleos para la comunidad con tasas de ingresos muy superiores al promedio en México. A cambio, los residentes continúan haciendo cumplir las reglamentaciones del parque, limpian las playas y protegen a animales importantes, como las tortugas marinas que anidan allí. El desafío es permanente, ya que el turismo crece en la región y ejerce nuevas presiones sobre los arrecifes y las poblaciones de peces. Existen planes de edificar un complejo turístico a solo millas al norte del arrecife, que, de no gestionarse adecuadamente, podría suponer un grave peligro para los avances realizados.

¿Por qué Cabo Pulmo ha tenido tanto éxito en la restauración de las poblaciones de peces? Resulta evidente que la participación de la comunidad, el tamaño del área protegida, la erradicación de la pesca y otros factores fueron esenciales para conseguir este impresionante éxito. Pero los científicos no han descubierto aún exactamente cómo pueden haberse recuperado en tan poco tiempo los principales depredadores de crecimiento lento, como los tiburones. Es probable que la naturaleza abierta del océano desempeñe un papel importante. Puede que los animales de crecimiento lento no se criaran en Cabo Pulmo, sino que se refugiaran allí durante migraciones desde y hacia otras regiones de peces abundantes o hábitats de corales saludables. A su vez, los peces que maduran en Cabo Pulmo se han extendido a otros arrecifes y regiones.

Tal vez hayas oído hablar acerca de los “océanos” del mundo. Sin embargo, en realidad, solo hay un océano totalmente conectado. Esto es esperanzador. Tal como se observa en Cabo Pulmo, lo que afecta positivamente a una región puede extenderse a otras y, si se gestionan adecuadamente, las poblaciones de peces que han sido diezmadas en un sitio pueden recuperarse con la ayuda de poblaciones de otras áreas. Aunque es poco probable que la recuperación de un arrecife en México permita que se recupere una población de peces en Australia, resulta alentador saber que el éxito puede tener un efecto dominó, propagando los efectos positivos más allá de los límites de sus propias acciones

Vista previa Vista aérea de una isla montañosa rodeada de agua azul.
El parque es tan exitoso e importante para la recuperación de las poblaciones de peces autóctonos que en 2005 fue nombrado sitio del Patrimonio Mundial de la UNESCO y, en 2008, se convirtió en un sitio de los Humedales de Importancia Internacional de Ramsar. (Michael Calderwood)
Septiembre 2014